Ha publicado cuento y ensayo en revistas y periódicos y es autora de las novelas Milán 27 y Frutales.

Introducción (1): edición de revistas, creo que las que más me han marcado han sido Viceversa, Código 06140 y National Geographic.

Llegar a Viceversa fue todo un reto. No sólo me integraba al equipo de la que fue una de las revistas más importantes de los noventa en un ámbito cultural-pop, sino porque Fernanda Solórzano, la editora anterior, había hecho un gran trabajo y eso me ponía un estandar muy alto.

Por otro lado, la revista atravesaba por un momento delicado de cambio. El grupo Raíces acababa de comprarla, por lo que Viceversa perdía la autonomía total lo que por fuerza cambiaría la dinámica editorial, su sus contenidos y su ánimo. Entré justo en esa transición, un año exactamente antes de que cerrara -claro que esto yo no lo sabía-.

Fue una rev ista en la que coincidían plumas consagradas y jóvenes incipientes a quienes, diez años después, vemos consolidarse en el panorama literario y cultural delpaís.

Esto necesariamente te forma como editora.

En el transcurso del año en el que estuve fue posible comenzar a intuir que el fin se acercaba. No creo que haya sido sólo por el cambio de propietarios, creo que también se debió a que se acababa una década y cambiaban las maneras de hacer revistas.

A los pocos meses de que se cerró Viceversa, en julio de 2001, entré a Código 06140. Era una revista flaca y engrapada con más deseos de cubrir una necesidad que se empezaba a gestar en la ciudad de México que una labor editorial rigurosa. Ese fue el gran año de cambio entre un milenio y otro. Con el 9/11 se definiría el ánimo que predominaría gran parte de la década y eso se fue reflejando en Código. De ser una revista inmediata y de servicio, se fue engordando con el contenido que la nueva generación buscaba. Pese a que también se btrataba de una publicación cultural-pop, había dejado atrás cierta tendencia reflexiva que hubo en los noventa. El nuevo milenio era más ligero, más conceptual, más trendy y diseñado. Código lo entendió bien.

Ahora que el primer decenio del siglo está por concluir, no sé que sigue en esa línea editorial. No sé si el papel sea ya el soporte indicado para una generación en sus tempranos veintes. Quizá el gran paso sea a internet. No sé si una publucación pueda tener la inmediatez y la rapidez en la entrega de información que ansían los jóvenes.

Por último, National Geographic. Es una revista que se encuentra en las antípodas de las dos revistas anteriores, en cuanto a tendencias editoriales. Y eso ha sido el gran aprendizaje. Con más de cien años de vida, NG es un ejemplo de rigor editorial, de meticulosidad y de un oficio impecable. Es una publicación muy conservadora editorialmente hablando y es de eso de donde se aprende.

Preguntas:

1. ¿Crees que hay lugar para más revistas neopop en México?
2. En tanto editora de National Geographic en México, ¿qué opinas de la llamada literatura verde, ecologista hasta la corrección política?
3. Habiendo sido editora cercana a la moda, tus metáforas son deliciosamente sensoriales, a veces parecen lemas publicitarios en el mejor de los sentidos (recuerdo el agua clorada, uñas color lodo, labios de ciruela); cómo ha influido tu trayectoria editorial en tus narrativas?
4. ¿Cómo consigues tal narrativa de diseño?: la voz narrativa es brutalmente contenida, gélida: ¿por qué ese estilo superracional, hiperculto?