Antes de dejar entrar el año nuevo, antes de hacer nuevos decretos, antes de enumerar las resoluciones que marcaran las ilusiones del futuro próximo, es importante cerrar cuentas. Hacer un balance y evaluar tanto los logros, los aciertos como los fracasos, los errores y las promesas incumplidas.
El inventario emocional es necesario para poder cerrar ciclos e iniciar nuevos proyectos de vida. Este proceso se logra por medio de una reflexión sincera y una evaluación concreta que confronte las expectativas con las acciones reales y los resultados obtenidos.
Un inventario emocional se refiere al concepto en donde la persona reconoce sus habilidades, sus debilidades, acepta sus responsabilidades, cuenta sus obligaciones, analiza sus ganancias y sus pérdidas, sabe exactamente quién es y con que cuenta. Es decir, el balance emocional, hace un análisis de la persona como un ser completo, abarcando todas sus áreas con el fin de captar la esencia y el todo y no solo cada una de sus partes por separado.
Existen cuatro pilares que contienen las áreas en las cuales la persona se desarrolla, estas áreas son: El amor, el trabajo, la diversión y la espiritualidad. Cuando estos planos se balancean y la persona puede tener acciones constructivas en cada una de estos ámbitos, entonces se logra un sentimiento de bienestar, que da por supuesto el poder tener una vida plena, satisfactoria y emocionalmente balanceada.
Como se puede cerrar las cuentas pendientes:
En el amor: Esta área esta dedicada a todas las relaciones afectivas que se tienen, especialmente la de pareja ya que esta, es una relación central en la vida de muchas personas. Por lo tanto, estar en balance en esta área permite y facilita la mejor disposición en las otras áreas.
La persona que se siente querida, aceptada y apoyada, tiene MEJORES posibilidades de sentirse segura y tranquila y más contenida.
El proceso de evaluación y balance de inventario aquí se inicia haciendo preguntas mus básicas como: ¿Ayudas a tu pareja cuando te lo pide? ¿Te sientes apreciada y reconocida? ¿Eres mejor persona gracias a tu pareja? O bien: ¿Por qué no tienes pareja? ¿Qué te ha hecho alejarte de tu pareja o de las personas que quieres?
Cuando el balance es positivo, felicidades tienes una relación productiva y efectiva, hay ganancias emocionales tales como bienestar, seguridad, correspondencia, compromiso, todos estos comportamientos que ayudan a mejorar la calidad de vida de cualquiera.
Si tu balance resulto negativo, pues ya sabes dónde iniciar el proceso, reconoce las áreas que están débiles, fíjate como las puedes fortalecer, y anímate a cambiar, para que puedas iniciar un buen año nuevo con mejores oportunidades.
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La receta
Balanceando la vida
Ingredientes
- 1 taza de sinceridad- aceptar la realidad sin justificaciones
- 2 cubitos de humildad- reconocer la vulnerabilidad y los errores propios
- 1 racimo de aceptación; valentía y gratitud por la oportunidad para superarse
- 3 gotas de fortaleza; carácter, decisión, convicción y actitud positiva
- 1 chorrito de actitud positiva – acciones constructivas que motiven a ver lo bueno
Recomendación del chef
Para iniciar un nuevo ciclo de vida es necesario hacer un balance emocional y determinar la condición real. Entre más sincero y consistente sea el análisis los resultados serán más objetivos y el balance será mas productivo y eficiente.
Modo de preparación
1. Todo análisis crea incomodidad necesaria para poder confrontar la realidad y poder hacer un balance efectivo. La contabilidad honesta es el recurso más importante que se tiene para poder hacer ajustes, cambios y mejorar la calidad de vida. Este proceso implica lucha y cambio, acciones difíciles, estresantes pero satisfactorias.
2. La actitud positiva y determinada facilita las acciones que requiere el inventario emocional. Solo cuando uno visualiza la posibilidad de estar mejor, cerrar viejos ciclos y superarse puede resistir y encontrar los benéficos que implica en trabajo de confrontación, sacrificio y compromiso.
3. Un cambio pequeño logra grandes alcances. El reconocimiento y la aceptación genuina de los errores logra maravillas como cambios profundos y duraderos. No es necesario hacer grandes modificaciones o insistir que los otros cambien cuando se trata de balancear los comportamientos personales,
