La sexualidad per se no existe, porque la sexualidad es un concepto, una abstracción, una idea que las personas se forman sobre un hecho específico: las relaciones sexuales, o más particularmente, el coito. ¿Cómo pasa esto? Cada cultura establece cuáles van a ser la ideas asociadas a este fenómeno, por ejemplo, en las culturas asiáticas como Japón y China no existe la palabra sexualidad como tal, e incluso han llegado a acuñar el término en inglés (sexuality) para referirse a este concepto, ya que ellos no lo conciben como tal. ¿Qué vamos a entender entonces por sexualidad cuando hablamos de ella? El médico y sexólogo E. Rubio ha propuesto que la sexualidad está compuesta por 4 potencialidades. ¿Qué quiere decir? Que el ser humano nace con estas características inherentes y a lo largo de su crecimiento las va a ir desarrollando. ¿Qué partes forman a la sexualidad?: el género, es decir, que tanto me siento hombre o mujer; la reproducitividad que es la capacidad de tener hijos con características similares a las nuestras; la vinculación afectiva que es la capacidad de desarrollar afectos intensos por otra persona; y finalmente lo que más se asocia con la sexualidad, el erotismo que es el apetito por la relación y la respuesta sexual (deseo, excitación y orgasmo). Estos son los componentes que forman la sexualidad pero varían de acuerdo a cada cultura y la época en la que se desarrolla dicha cultura. Así, los romanos tenían una concepción de la sexualidad, los mesopotámicos tenían otra, los mexicanos tenemos una concepción sobre sexualidad y así cada país. Para terminar, los invito a que me escriban al correo educacionsexual@hispanopolis.com.