La variante Delta de la , ya detectada en 98 países, se está convirtiendo rápidamente en la cepa dominante en muchos países, lo que nos coloca en un momento “muy peligroso de la ”, advirtió este viernes el director general de la , Tedros Adhanom Ghebreyesus.

“Agravado por más transmisibles, como la Delta, que se está convirtiendo rápidamente en la cepa dominante en muchos países, estamos en un período muy peligroso de esta pandemia de COVID-19”.

Señaló que la variante Delta es peligrosa y continúa evolucionando y mutando, por lo cual se requiere evaluar constantemente y ajustar de manera cuidadosa la respuesta sanitaria. Delta ha sido detectada en al menos 98 países y se está esparciendo rápidamente en países con altos y bajos niveles de vacunación contra Covid-19.

Dio a conocer que en zonas como Europa la alerta sanitaria se ha relajado por el descenso de casos, pero en países con bajas tasas de vacunación sigue habiendo “terribles escenas” de hospitales saturados.

Sin embargo, “en los países con bajos niveles de vacunación, las terribles escenas de hospitales saturados se están convirtiendo en la norma. Pero ningún país está a salvo todavía”, advirtió.

Mantener medidas preventivas, para evitar nuevas olas de contagios

En estos momentos, las medidas sociales y de , como una vigilancia sólida, pruebas estratégicas, detección temprana de casos, aislamiento y atención clínica, siguen siendo fundamentales, aseguró Tedros.

“Las mascarillas, la distancia física, evitar lugares concurridos y mantener las áreas interiores bien ventiladas son la base de la respuesta”, agregó.

Además, puso de relieve la importancia de compartir equitativamente el equipo de protección, el oxígeno, las pruebas, los tratamientos y las vacunas.

Instó a los líderes de todo el mundo a trabajar juntos para garantizar que para esta época del próximo año, el 70% de todas las personas en todos los países estén vacunadas.

“Esta es la mejor manera de frenar la pandemia, salvar vidas, impulsar una recuperación económica verdaderamente global y, en el camino, evitar que otras variantes peligrosas tomen la delantera”, explicó en la sesión informativa.

Un objetivo intermedio, también expresado por Tedros con anterioridad, es el de lograr en septiembre de este año que al menos un 10% de la población de todos los países esté vacunada contra la Covid-19, lo que cubriría como mínimo los grupos de mayor riesgo.

Pide a Moderna y Pfizer compartir tecnología para fabricación de nuevas vacunas

Al señalar que ahora se están compartiendo algunas vacunas, recalcó que todavía es sólo un goteo, y que está siendo superado por las variantes.

“En aquellos países cuyos hospitales se están llenando, necesitan vacunas y otras herramientas de salud ahora mismo”, enfatizó.

La OMS pidió a las farmacéuticas Moderna y Pfizer-BioNTech que compartan su conocimiento para el desarrollo de producción de vacunas contra Covid-19 con la nueva tecnología ARN mensajero y, de esta forma, construir lo antes posible más centros de fabricación de vacunas para acelerar la producción mundial de dosis.

Instalaciones similares a la sudafricana están preparándose en otros países, “pero esto se puede acelerar si las compañías comparten abiertamente esta tecnología”, resaltó Tedros, dirigiéndose expresamente a Moderna y Pfizer-BioNTech.

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