Tras los últimos ataques que se han producido en contra de personajes de la historia hispana (Desde Cristóbal Colón, hasta San Junípero Serra, pasando por Miguel de Cervantes o Isabel la Católica) The Hispanic Council (El Consejo Hispano) de Estados Unidos acaba de poner en marcha la campaña #RespectHispanicHeritage (Respeta la Herencia Hispana).
La idea principal de este Consejo es reivindicar la herencia cultural hispana en la historia y el presente de Estados Unidos.
Para hacerlo han impreso y distribuido un documento-guía con los diez motivos para reivindicar esta herencia, la gran mayoría de los cuales no solo no son conocidos por los estadounidenses, sino por los propios hispanos o latinos que viven en la Unión Americana.
Medio milenio de presencia española
El primer punto es muy general: la historia de Estados Unidos no puede entenderse sin la aportación hispana. Más de 500 años de presencia hispana han generado un legado imborrable que forma parte de la identidad actual de Estados Unidos.
El segundo punto recuerda que España fue el país que más protegió a los nativos americanos. Es innegable que hubo excesos y violencia, que las autoridades españolas persiguieron y condenaron, pero España fue el primer país, desde 1512, que impulsó leyes que protegían a los nativos, que tuvieron los mismos derechos y deberes que todos los españoles.
Más adelante, como tercer punto del decálogo indica que el mestizaje es la clave en el desarrollo de la cultura hispana. A diferencia de otros países, si algo diferenció el modelo español en América fue la política de integración y mestizaje.
En cuarto lugar el decálogo pone en evidencia el hecho de que muchas ciudades estadounidenses tienen un origen hispano. Ciudades como Los Ángeles, San Diego, San Antonio o San Francisco no se pueden concebir sin su rico legado cultural hispano, esenciales para entender su historia y su identidad.
También, y como quinto punto, muestra que la herencia hispana está presente en los símbolos de Estados Unidos. Las banderas de muchos estados y ciudades, así como sus escudos, tienen su origen en el legado español e hispano del país, en los que puede verse claramente su herencia hispana.
Del dólar a la independencia
Elementos esenciales de la cultura de Estados Unidos tienen un origen hispano, lo que muestra la estrecha relación entre ambos países, señala el sexto punto. Como ejemplos ponen al dólar y a los vaqueros o cowboys.
Por supuesto, el séptimo punto toca un tema esencial de la actualidad: el español es hoy la segunda lengua más hablada de Estados Unidos. Además recuerda que el español fue el primer idioma no nativo hablado en territorio estadounidense, desde la llegada de Ponce de León a Florida en 1513. Desde entonces, ha sido hablado de generación en generación por millones de personas en Estados Unidos.
En el octavo punto, señala otro elemento muy poco difundido en Estados Unidos: que España y los hispanos jugarán un papel esencial en la independencia de ése país. Personajes españoles como Bernardo de Gálvez, Fernando de Leyba o Diego de Gardoqui contribuyeron de forma esencial a la independencia estadounidense, así como miles de soldados hispanos.
Más adelante señala algo que no tienen muy en cuenta los actuales derribos de estatuas y acoso a personajes célebres que algo tuvieron que ver con España y América española: que juzgar la historia con los parámetros sociales y culturales actuales es un error.
Finalmente y como décimo punto, se señala que la aportación de España a América merece la pena ser reivindicada por todo el legado cultural, social, lingüístico, institucional y demográfico que generó. España, con sus luces y sombras, promovió la cultura hispana que hoy forma parte de las señas de identidad de millones de personas a ambos lados del Atlántico.