INDIGO
Los occidentales expresan los colores en función de los 7 colores del arco iris descubiertos en el prisma de Newton. Los antiguos orientales los definen basándose en su teoría de cinco elementos de las dos fuerzas básicas: Para ellos la madera es azul; el fuego, rojo; la tierra, amarillo; el metal, blanco y el agua, negro. En ambas civilizaciones y desde la más remota antigüedad, el azul ha predominado como colorante para vestimentas. El índigo o añil ha viajado por el tiempo desde el antiguo Egipto hasta su utilización en los vaqueros Levi´s, pero la cosecha de tan preciada planta (la indigofera tinctoria) no alcanza en el presente para teñir los millones de pantalones que se confeccionan en el mundo. La síntesis industrial del índigo fue desarrollada en 1890 y a partir de ahí el tinte sintético sustituyó al bellísimo color natural.
CALZONES FEMENINOS
“Esconde lo que quieras que llame la atención”. Eso lo sabía Catalina de Médicis cuando decidió usar “la banda para las nalgas”, es decir, calzones. Catalina siguió el ejemplo de las cortesanas venecianas las que a su vez se remontaron más de un milenio para sacarle jugo al subligaculum que, en sus orígenes fue una especie de taparrabo lucido para excitar a sus clientes. Las mujeres galantes rellenaban su prenda íntima donde más lo necesitaban y presumían que podían entregarse a su amante sin quitarse los calzones pues tenían la particularidad de abrirse o escotarse a gusto, un modelo muy original en su época, imitado por Victoria´s Secret o Fredericks. El uso de la ropa interior siguió su camino hasta llegar a nuestros días donde la higiene, el decoro y la sensualidad buscan su lugar.